No soy amante de la pechuga de pollo porque me parece muy seca, pero se que es la parte del pollo que prefieren la mayoría de las personas, por eso siempre trato de prepararlas en recetas guisadas con una buena salsa. La receta de hoy la acompaño con patatas (papas) al vapor, espero que les guste!
Ingredientes
(2 porciones)
- 2 pechugas de pollo sin piel
- 1 cebolla
- 1 diente de ajo
- 1 trocito de pimiento rojo
- 200 ml. de vino tinto
- 100 ml. de agua templada
- 1 cdta. de miel
- 1 hojita de laurel
- Sal y pimienta al gusto
- Aceite de girasol
- Aceite de oliva
Preparación
Empezamos por trocear las pechugas a nuestro gusto, yo lo hice en trozos pequeños pero también podemos picarlas como filetes delgaditos. Las sazonamos con sal y pimienta y les añadimos la cucharadita de miel, yo le pongo mas pimienta de lo normal porque en esta receta me gusta que se sienta el toque fuerte de la pimienta, pero si le ponen solo un poquito o no le ponen no pasa nada.
En una sartén mediana con 3 cucharadas de aceite de girasol doramos el pollo a fuego medio alto, cuando esté doradito retiramos de la sartén y reservamos.
En una cazuela u olla mediana con dos cucharadas de aceite de oliva ponemos a cocinar la cebolla y el ajo, ambos picaditos lo mas pequeño posible. Cuando esté pochada la cebolla (transparente) añadimos el pimiento picado pequeñito. Cuando esté todo dorado añadimos el pollo que teníamos reservado, la hoja de laurel y dejamos cocinar por unos 10 min.
Agregamos el vino y el agua, esperamos hasta que hierva. En este punto podemos probar el punto de sal de la salsa y corregirlo si hace falta, recordemos que solo le hemos puesto sal al pollo antes de freirlo. Bajamos el fuego a temperatura media baja, tapamos y dejamos cocinar por 30 min. Pasado el tiempo la salsa debería tener una consistencia mas espesa, apagamos y listo para servir!
Buen apetito!
Acabo de prepararlo y me quedo riquísimo, muchas gracias :) !
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